«La mente está siempre divagando continuamente de un lugar a otro, arrastrada por la corriente incesante de pensamientos, emociones, etc.»
La integración de la práctica de Mindfulness con las técnicas de terapia cognitivo-conductual permite que el participante adquiera una variedad de habilidades que ayudan a reducir la preocupación, la rumiación, la reactividad cognitiva y la emocional.
- 2. Objetivos
El primer objetivo de la práctica de mindfulness es aquietar la mente, calmarla, tomarla serena y tranquila.
- 3. Método
Entrenando a la mente para vivir en el momento presente y aumentar la conciencia de las experiencias que vivimos tal como son, sin distorsionarlas. Debilitando los patrones automáticos de respuesta motivando la aparición de respuestas más adecuadas y eficaces.
«Aprediendo a responder en vez de reaccionar.»
Comprendiendo los procesos psicológicos que están en la base de muchos de nuestros problemas emocionales y de relación con los demás.
- 4. Desarrollo de habilidades
Desarrollando habilidades de autogestión emocional manteniendo mayor equilibrio en los estados de ánimo.
Aprendiendo a cuidar mejor de nosotros mismos, para que seamos capaces de vivir nuestras vidas de forma más saludable y plena.
Aprendiendo habilidades que ayuden a prevenir espirales de ansiedad o depresión.